“La Radiología es una especialidad muy dependiente de la tecnología”. Así lo ha afirmado en una entrevista a ConSalud.es José Cervera, presidente de la Comisión Oncológica de la Sociedad Española de Radiología Médica (SERAM). Porque, gracias a la tecnología, en los últimos años se han producido grandes avances en esta materia, que en el ámbito de patologías oncológicas, supone mejoras trascendentales.
“La detección precoz de tumores que clínicamente no son detectables, tiene la posibilidad de tratamientos menos agresivos, más sencillos, menos costosos, más eficaces y curativos. Con la imagen radiológica se puede determinar la extensión del tumor y elegir el tratamiento más adecuado”, expone.
La imagen funcional y molecular son capaces de aportar información del comportamiento de un tumor hasta el momento de su diagnóstico y durante el seguimiento a lo largo del tratamiento. Lo más desarrollado en las últimas décadas ha sido la resonancia magnética, que “proporciona no solo imágenes con alta resolución, sino también información de la perfusión de los tejidos y la disfunción de las moléculas, lo que nos está ayudando a comprender el mecanismo complejo del comportamiento del cáncer cuando se aplica un tratamiento”.
El otro gran avance, dice el doctor, es el desarrollo de radiotrazadores específicos para cada órgano o tumor que permiten obtener información “tanto de su forma como de su función mediante equipos mixtos de imagen como el PET-TC o más reciente PET-RM”.
Estos nuevos escáneres permitirían al paciente un diagnóstico mucho más rápido (tan solo una semana) y evitar tener que realizarse dos pruebas distintas.
CRÍTICA AL OPORTUNISMO POLÍTICO EN LA INVERSIÓN
Además de que, gracias a estos avances se mejora el conocimiento del cáncer, diagnóstico y tratamiento, el doctor Cervera destaca que se lograrán evitar actuaciones o tratamientos innecesarios o corregir a tiempo aquellos que no funcionen “ya que la detección de estos cambios son más rápidos y seguros, lo que evita toxicidades, efectos adversos a los pacientes y gasto innecesario al Sistema Nacional de Salud”.
Según explica, el problema radica en que “las restricciones en la inversión hacen que buena parte del equipamiento esté anticuado y que, por una parte, no proporcione al paciente una atención sanitaria adecuada y que, por otra, se despilfarre mucho dinero en reparaciones de los equipos y en las paradas técnicas causadas por las averías frecuentes causadas por su envejecimiento”.
El doctor critica que las épocas de expansión en la inversión tecnológica coinciden solo con promoción política, “para salir en los medios, y esas tecnologías con frecuencia no son necesarias, no se adecúan a las necesidades de los servicios para los que se adquieren”, por lo que considera necesaria la creación de comisiones técnicas para establecer mejor los criterios y necesidades de renovación de los equipos. La SERAM, por ello, otorga todos los años becas a la investigación, muchas de ellas destinadas al ámbito oncológico.
“La detección precoz de tumores que clínicamente no son detectables, tiene la posibilidad de tratamientos menos agresivos, más sencillos, menos costosos, más eficaces y curativos. Con la imagen radiológica se puede determinar la extensión del tumor y elegir el tratamiento más adecuado”, expone.
La imagen funcional y molecular son capaces de aportar información del comportamiento de un tumor hasta el momento de su diagnóstico y durante el seguimiento a lo largo del tratamiento. Lo más desarrollado en las últimas décadas ha sido la resonancia magnética, que “proporciona no solo imágenes con alta resolución, sino también información de la perfusión de los tejidos y la disfunción de las moléculas, lo que nos está ayudando a comprender el mecanismo complejo del comportamiento del cáncer cuando se aplica un tratamiento”.
El otro gran avance, dice el doctor, es el desarrollo de radiotrazadores específicos para cada órgano o tumor que permiten obtener información “tanto de su forma como de su función mediante equipos mixtos de imagen como el PET-TC o más reciente PET-RM”.
Estos nuevos escáneres permitirían al paciente un diagnóstico mucho más rápido (tan solo una semana) y evitar tener que realizarse dos pruebas distintas.
CRÍTICA AL OPORTUNISMO POLÍTICO EN LA INVERSIÓN
Además de que, gracias a estos avances se mejora el conocimiento del cáncer, diagnóstico y tratamiento, el doctor Cervera destaca que se lograrán evitar actuaciones o tratamientos innecesarios o corregir a tiempo aquellos que no funcionen “ya que la detección de estos cambios son más rápidos y seguros, lo que evita toxicidades, efectos adversos a los pacientes y gasto innecesario al Sistema Nacional de Salud”.
Según explica, el problema radica en que “las restricciones en la inversión hacen que buena parte del equipamiento esté anticuado y que, por una parte, no proporcione al paciente una atención sanitaria adecuada y que, por otra, se despilfarre mucho dinero en reparaciones de los equipos y en las paradas técnicas causadas por las averías frecuentes causadas por su envejecimiento”.
El doctor critica que las épocas de expansión en la inversión tecnológica coinciden solo con promoción política, “para salir en los medios, y esas tecnologías con frecuencia no son necesarias, no se adecúan a las necesidades de los servicios para los que se adquieren”, por lo que considera necesaria la creación de comisiones técnicas para establecer mejor los criterios y necesidades de renovación de los equipos. La SERAM, por ello, otorga todos los años becas a la investigación, muchas de ellas destinadas al ámbito oncológico.
Extraido de : Diario ''El nuevo Herarld'', 23 de Diciembre de 2014